Síndrome de las piernas inquietas: Enfermedad rara y desconocida
Si a usted en la noche le cuesta conciliar el sueño, siente una necesidad imperiosa de mover las piernas en cualquier momento, o tiene sensaciones extrañas en sus piernas como hormigueo, ardor, dolor, palpitaciones o una molestia constante, ¡ALERTA! Puede estar sufriendo del Síndrome de las piernas inquietas.
Aún hoy por hoy los especialistas desconocen a que se deba el llamado Síndrome de las piernas inquietas, sólo se conoce que es un trastorno neurológico caracterizado por un sinfín de sensaciones involuntarias en las piernas acompañado de la necesidad imperiosa de moverlas aun cuando se está en descanso; por lo que sigue considerándose como una enfermedad desconocida y rara para muchos por lo difícil de su diagnóstico.
Historia del Síndrome
Su historia se remonta a la segunda mitad del siglo XVII cuando con el primer análisis, una persona fue diagnosticada con una inquietud de miembros inferiores, lo que al tiempo fue denominada como Síndrome.
Esta patología es de difícil diagnóstico porque muchas veces el paciente es remitido tardíamente con el neurólogo quien es el encargado de tratarla, si bien esta patología no conlleva a la incapacidad de la persona o a su muerte, si disminuye la calidad de vida de las personas, de allí la importancia de su detección temprana y oportuna para mejorar el estándar de vida.
El síndrome de las piernas inquietas, puede afectar a personas de cualquier sexo y edad, pero es más recurrente en las mujeres, incluso estando éstas en estado de gestación, en especial cuando se encuentran en los últimos meses de embarazo, sin embargo los síntomas pueden desaparecer cuando éste período termina. Igualmente esta patología tiene mayor incidencia en personas de edad media o mayores de 40 años.
¿Qué causa el Síndrome?
Sigue siendo confusa las causas que conllevan a una persona al padecimiento de esta patología, sin embargo se manejan algunas teorías entre ellas el factor hereditario y el bajo nivel de hierro presente en la sangre. Igualmente se asocia esta enfermedad con la presencia de patologías crónicas como la insuficiencia renal, la diabetes, artritis o algún trastorno del sistema nervioso central.
Ante la presencia del síndrome se recomienda:
Evitar el consumo de bebidas excitantes antes de dormir
Consumo de comidas copiosas.
Tomar suplementos de hierro.
Disminuir el consumo de azúcar y sal.
Realización de ejercicio
Tomar un baño de agua caliente antes de dormir.
No existe forma de prevención de este síndrome pero el manejo de una vida saludable pueden alejar o retrasar la aparición de este trastorno neurológico.